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Reconfigurando la fabricación mundial

Las claves:

  • Mientras las empresas de todo el mundo buscan centros de producción más resistentes, sostenibles y rentables, una nueva empresa se propone catalizar y transformar las estrategias industriales.
  • La tendencia a la «deslocalización» ha llevado a las empresas a trasladar sus instalaciones de fabricación más cerca de sus mercados reales. Una encuesta realizada por Accenture a empresas de todo el mundo en junio de 2023 reveló que el 85% preveía que produciría y vendería la mayoría de sus productos en la misma región en 2026, un aumento de casi el doble.
  • La misma investigación también sugirió que la reubicación geográfica es sólo un paso en el camino hacia la resiliencia, y que la inversión en tecnología digital también es esencial para que la producción sea más flexible y ágil. Según el informe, las empresas invierten una media de 1.000 millones de dólares para digitalizar, automatizar y reubicar las instalaciones de suministro y producción, y se espera que esta cifra aumente hasta al menos 2.500 millones de dólares en 2026.

La pandemia del virus Covid-19 provocó enormes trastornos en la cadena de suministro mundial, y estas turbulencias han persistido gracias a la actual agitación geopolítica. El resultado es que los costes de envío siguen siendo elevados y los clientes se sienten frustrados y comprometidos. Esto ha llevado a las empresas de todo el mundo a centrarse en las formas en que las cadenas de suministro y las operaciones de fabricación pueden hacerse más resistentes y sostenibles.

La tendencia a la «deslocalización» ha llevado a las empresas a trasladar sus instalaciones de fabricación más cerca de sus mercados reales. Una encuesta realizada por Accenture a empresas de todo el mundo en junio de 2023 reveló que el 85% preveía que produciría y vendería la mayoría de sus productos en la misma región en 2026, un aumento de casi el doble.

En la actualidad, las empresas pueden enfrentarse a importantes exigencias de capital a la hora de crear un ecosistema de fabricación preparado para el futuro.
La misma investigación también sugirió que la reubicación geográfica es sólo un paso en el camino hacia la resiliencia, y que la inversión en tecnología digital también es esencial para que la producción sea más flexible y ágil. Según el informe, las empresas invierten una media de 1.000 millones de dólares para digitalizar, automatizar y reubicar las instalaciones de suministro y producción, y se espera que esta cifra aumente hasta al menos 2.500 millones de dólares en 2026.

«Las empresas pueden enfrentarse actualmente a importantes demandas de capital a la hora de crear un ecosistema de fabricación preparado para el futuro», afirma Amit Midha, CEO de Alat, una empresa de reciente creación centrada en la transformación de industrias globales (electrónica e industrial) en Arabia Saudí. «Pero, al mismo tiempo, saben que la innovación tecnológica es clave para el éxito».

A medida que las empresas se comprometen con los objetivos de emisiones de carbono, el «greenshoring» es otra estrategia potencialmente exitosa. En lugar de fabricar productos en países lejanos al menor coste posible, pero con un elevado impacto medioambiental, ahora se apuesta por la fabricación sostenible. Para ello se prima la producción de bienes en lugares con fácil acceso tanto a materias primas como a fuentes de energía renovables, así como la adopción de soluciones tecnológicas que permitan alcanzar objetivos de emisiones cero.

Reimaginar la fabricación mundial

El Reino de Arabia Saudí se está posicionando actualmente como un centro para el nuevo mundo de la fabricación resistente, sostenible y asequible, y ello puede conferirle muchas ventajas. Desde el punto de vista geográfico, se encuentra a pocas horas de los mercados existentes y potenciales de Europa, África, Oriente Medio y Asia Central. También se está convirtiendo en una fuente potencial de materias primas, con unas reservas minerales sin explotar estimadas en 2,5 billones de dólares.

Está bien comunicado por las principales rutas aéreas y marítimas, y el gobierno saudí tiene previsto invertir 147.000 millones de dólares en nuevas infraestructuras de transporte y logística. Además, en un país con un presupuesto anual para educación de 50.000 millones de dólares y en el que el 63% de los ciudadanos tiene menos de 30 años, hay una gran cantidad de jóvenes talentos en STEM a los que recurrir.

La ecologización es uno de los ejes del programa saudí Visión 2030, y el Reino está invirtiendo 266.000 millones de dólares en energía limpia, sobre todo solar y eólica. También hay planes para nuevas tecnologías de electrificación e hidrógeno verde para instalaciones y maquinaria en plantas de fabricación, sustituyendo los combustibles fósiles por alternativas limpias.

Un nuevo centro regional para la industria

El reciente lanzamiento de Alat pretende catalizar la transformación de Arabia Saudí y atraer a empresas mundiales para que establezcan soluciones de fabricación sostenibles, convirtiendo al país en un centro de categoría mundial para la electrónica y la producción industrial avanzada. Inicialmente, sus áreas de negocio estratégicas clave serán los semiconductores, los dispositivos inteligentes, los edificios inteligentes, los electrodomésticos inteligentes, la salud inteligente, la industria avanzada, las tecnologías de infraestructuras de nueva generación, la electrificación y la infraestructura de inteligencia artificial.

En el centro de nuestra misión, queremos ayudar al mundo a reimaginar el uso de la inteligencia artificial, situar la sostenibilidad en primer plano, aumentar la resiliencia y potenciar la innovación.
Además de una energía limpia abundante y asequible y una geolocalización altamente conectada, los atractivos de Alat para los fabricantes del mundo incluyen el uso de tecnología de vanguardia, en particular la IA, y la oferta de capital paciente para apoyar las inversiones a largo plazo en operaciones. Una empresa FPI, Alat será un facilitador esencial de los objetivos de Visión 2030 para la diversificación económica, el desarrollo industrial, la innovación y la creación de empleo.

«En el centro de nuestra misión, queremos ayudar al mundo a reimaginar el uso de la IA, situar la sostenibilidad en primer plano, aumentar la resiliencia y potenciar la innovación», afirma Midha. «Trasladar las operaciones a Alat aporta ventajas considerables en términos de greenfield, infraestructura libre de legados, integración nativa de nuevas tecnologías y capital a largo plazo fácilmente disponible.»

Alat ya trabaja con algunas de las empresas más grandes e innovadoras del mundo, y ha anunciado importantes colaboraciones con el grupo japonés Softbank y la china Lenovo. «Buscamos empresas de talla mundial en sus respectivos sectores para que se asocien con Alat, con el fin de reimaginar la fabricación, reducir las emisiones y avanzar hacia una producción más sostenible», afirma Midha. «Alat encarna una audaz visión de futuro, y buscamos organizaciones que compartan nuestras ambiciones de un mañana mejor».

 

Fuente: Financial Times

Foto: patrick-hendry-unsplash

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