Las claves:
- Las elecciones presidenciales de Estados Unidos en 2024 tienen un impacto considerable en el ámbito comercial global, especialmente en las empresas industriales de Europa.
- Con candidatos que proponen diferentes enfoques hacia China, tanto Donald Trump como Kamala Harris ofrecen visiones que afectarían a las cadenas de suministro, políticas comerciales y competitividad de las empresas europeas.
- En un contexto donde el comercio entre EE.UU. y China se ha vuelto complejo, estas elecciones podrían definir el marco en que Europa maneje sus relaciones con estos dos gigantes económicos.
1. La Política Comercial de Kamala Harris: Continuidad y Cautela en la Rivalidad EE.UU.-China
Se prevé que el enfoque de Harris seguiría la línea de la administración Biden, que ha mantenido una postura de “decoupling” parcial en sectores sensibles como los semiconductores y la tecnología de comunicación. Este enfoque busca proteger la innovación estadounidense sin recurrir a una confrontación directa que impacte al comercio de productos no estratégicos. Para Europa, esta administración podría implicar menos confrontación abierta y permitir a las empresas europeas mantener relaciones comerciales con China en áreas menos sensibles, como energías renovables y tecnología intermedia
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2. La Política de Donald Trump: Confrontación y Mayor Aislamiento Económico
Por otro lado, Donald Trump ha reiterado su intención de confrontar a China de manera directa, con propuestas como una tarifa general del 60% para todas las importaciones chinas, prohibiciones en nuevas inversiones chinas y una política de desacoplamiento total, reconsiderar sus relaciones comerciales, ya que China podría redirigir sus exportaciones hacia Europa, intensificando la competencia y presionando a los países europeos a adoptar políticas proteccionistas. En este sentido, una presidencia de Trump podría significar el fin de la autonomía comercial europea, pues EE.UU. probablemente presionaría a la UE para alinearse con sus restricciones comerciales contra China.
3. Implicaciones para Sectores Industriales Estratégicos en Europa
- Sector Automotriz: Europa depende de componentes chinos, como baterías y elementos electrónicos, especialmente para la fabricación de vehículos eléctricos. Con Harris, la política de “decoupling” parcial de EE.UU. permitiría mantener el flujo de componentes, aunque con incentivos para desarrollar capacidades locales y reducir la dependencia a largo plazoBajo Trump, la UE se enfrentaría a una presión mayor para aplicar aranceles en vehículos eléctricos y baterías de China, elevando los costos y reduciendo la competitividad de la industria automotriz europea.
- Tecnología y Semiconductores: El acceso a semiconductores de alta tecnología es crítico para la industria europea. Harris probablemente mantendría un enfoque de limitación en áreas específicas, permitiendo a las empresas europeas operar en sectores menos sensibles sin una ruptura total. Sin embargo, Trump ampliaría las restricciones tecnológicas, forzando a la UE a decidir entre el acceso a tecnología estadounidense o mantener relaciones con China, lo que perjudicaría la competitividad en sectores tecnológicos avanzados.
4. Efectos Potenciales en la Política Comercial de la UE
Europa intenta equilibrar sus relaciones comerciales entre EE.UU. y China, manteniendo cierta autonomía estratégica. Sin embargo, bajo una presidencia de Trump, la UE podría enfrentar sanciones secundarias si no se alinea con las políticas de EE.UU. contra China, obligando a las empresas europeas a elegir entre los mercados de EE.UU. y China
Harris, por otro lado, podría ofrecer un enfoque menos confrontacional y permitir a la UE decidir el ritmo de su “desacoplamiento” sin presiones drásticas.
5. Implicaciones Geoestratégicas en Sectores Clave: Semiconductores, Metales Industriales y Tierras Raras
Además de los sectores automotriz y tecnológico, las empresas europeas enfrentan desafíos en sectores como los semiconductores, los metales industriales y las tierras raras, esenciales para la fabricación de productos de alta tecnología y la transición hacia una economía verde y digital en Europa.
Semiconductores: El Corazón de la Competencia Tecnológica
Los semiconductores son vitales en tecnología avanzada, y Europa depende en gran medida de las importaciones. Con Harris, Europa podría mantener acceso limitado a tecnología de punta mientras diversifica su cadena de suministro, sin imposiciones fuertes desde EE.UU. Trump, en cambio, probablemente aplicaría sanciones amplias para impedir que los socios europeos mantengan comercio tecnológico con China. Esto forzaría a la UE a implementar una producción propia a gran escala, un proceso costoso que impactaría la competitividad europea
Metales Industriales y Tierras Raras: Dependencia Europea y Tensión Comercial
China controla la mayoría de la producción global de tierras raras, vitales para industrias como la automoción eléctrica y la tecnología verde. Una presidencia de Harris incentivaría a Europa a reducir su dependencia china mediante proyectos en países aliados, aunque sin rupturas drásticas. Bajo Trump, la UE podría enfrentar presiones para restringir su comercio de tierras raras con China, obligándola a asumir altos costos para reemplazar estos materiales en un proceso de abastecimiento más autónomo
Baterías y Tecnología Verde: La Transición Energética Europea en Riesgo
Europa depende de tecnología verde china, como baterías de litio y paneles solares. Con Harris, EE.UU. buscaría una reducción paulatina en la dependencia de componentes chinos sin afectar de inmediato el suministro europeo. Por otro lado, Trump podría impulsar un “decoupling” total, aumentando los costos de componentes para energías renovables en Europa, lo que retrasaría los objetivos climáticos y pondría en riesgo la competitividad industrial europea en energías limpias
Las elecciones en EE.UU. representan un cambio crítico en las relaciones comerciales entre EE.UU., China y Europa. Con Harris, la UE mantendría una autonomía relativa, permitiendo un “decoupling” gradual en sectores sensibles. En cambio, una administración de Trump presionaría a la UE a alinearse con una confrontación directa contra China, lo que afectaría profundamente las industrias europeas que dependen de cadenas de suministro globales en sectores como los semiconductores y las tecnologías verdes.
Fuentes:
- Center for Strategic and International Studies (CSIS), “US-China Competition and Europe’s Strategic Autonomy in Semiconductors and Technology,” 2023. CSIS.
- Centre for European Reform (CER), “Europe’s Strategic Autonomy and the US-China Rivalry: Challenges in Trade and Technology,” 2024. CER.
- Atlantic Council, “Transatlantic Trade Relations and the Future of European Strategic Autonomy,” 2024. Atlantic Council.
- European Union Institute for Security Studies (EUISS), “Europe’s Dependency on Critical Minerals and Geopolitical Tensions,” 2023. EUISS.
- Brookings Institution, “The Impact of US-China Decoupling on Europe’s Economy and Technological Ambitions,” 2023. Brookings.
- World Economic Forum (WEF), “Global Supply Chains and the US-China Trade War: Implications for Europe’s Technological Future,” 2023. WEF.
- McKinsey Global Institute, “Europe’s Strategic Autonomy in a Changing Global Economy,” 2024. McKinsey.
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