“Ojo por ojo y el mundo acabará ciego” decía Ghandi. Son varios los contenidos que hemos incluido en este último año a lo largo de este último año acerca de la guerra comercial entre USA y China. Y es que un contexto internacional inestable, tanto por la coyuntura económica como por la disputa de los liderazgos geopolíticos, acaba teniendo impacto en la gestión de compras de nuestras empresas.
En esta ocasión incluimos una noticia que apunta a que, a pesar de la guerra comercial y de las tensiones en la industria tecnológica, Wall Street y China continúan acercándose y entablando vínculos económicos y comerciales.
Aunque las tensiones entre Estados Unidos y China en la industria tecnológica continúan creciendo, “Wall Street y China se están acercando”, informó la revista The Economist.
BlackRock, una compañía estadounidense de administración de activos globales, Vanguard, un asesor de inversiones registrado en Estados Unidos y la compañía de servicios financieros y banco de inversión líder en Estados Unidos, JPMorgan Chase, han estado expandiendo continuamente sus negocios en China, escribió un artículo publicado por la revista.
“Sin embargo, en una parte de la economía global, el patrón es de participación de superpotencias, no de distanciamiento: altas finanzas”, escribió. “El gusto de Wall Street por China refleja una apuesta a largo plazo de que el centro de gravedad de las finanzas se desplazará hacia el este”.
El artículo decía que Washington ha tratado de “convertir en arma la preeminencia de Estados Unidos, presionando a las empresas chinas para que eliminen sus acciones de Nueva York”.
“Pero en todo caso, la guerra comercial ha mostrado el creciente poderío financiero de China”, señaló.
Una gran ola de empresas está recurriendo a Hong Kong de China para la oferta pública inicial (OPI), y luego está “la sorprendente avalancha de firmas de Wall Street y otros inversores extranjeros” hacia China continental, según el artículo.
Al señalar que la capacidad de China para atraer empresas de Wall Street durante la guerra comercial refleja “la influencia que tienen sus mercados de capital”, el artículo sugirió que China “cree su propia infraestructura global de finanzas y pagos y haga que el yuan sea más libremente convertible” para convertirse en una superpotencia financiera.
Fuente: The Economist